El evento se llevará a cabo mañana lunes 4 de agosto a las 10:00 horas, en el Tecnológico de Software, con entrada libre y la participación de especialistas de instituciones como el CICY.
Con el propósito de visibilizar propuestas sustentables, impulsar el talento joven y fomentar el diálogo entre academia, gobierno, sector productivo y sociedad civil frente a los retos ambientales de la costa, la Secretaría de Ciencia, Humanidades, Tecnología e Innovación (Secihti) convoca al Foro de Innovación Tecnológica Aplicada al Sargazo en Yucatán.
La actividad se llevará a cabo el próximo lunes 4 de agosto, de 10 a.m. a 12:30 p.m., en el Instituto Tecnológico del Software, ubicado en la calle 18 número 103 por 25 de la colonia México.
La entrada será libre y el programa incluye una charla magistral sobre esta macroalga, así como la presentación de proyectos estudiantiles del Centro de Investigación Científica de Yucatán (CICY) y de la institución anfitriona.
La titular de la Secihti, Geovanna Campos Vázquez, explicó que este foro tiene como objetivo demostrar que, con conocimiento y colaboración, es posible transformar los desafíos ambientales en motores de innovación y justicia social.
Como parte del programa, la funcionaria adelantó que se llevará a cabo una mesa panel con especialistas en biotecnología marina, transferencia tecnológica, economía circular e innovación, con la participación de representantes del CICY, Área 71, Adora Foundation y la Red Estatal de Investigadoras e Investigadores.
Yucatán cuenta con una sólida trayectoria en el estudio y aprovechamiento del sargazo. Un ejemplo de ello es el desarrollo de biogás, tema en el que trabaja la investigadora del CICY, Karla Azcorra May, quien explicó que están desarrollando un proceso químico innovador para convertir el sargazo en combustible, único en su tipo y actualmente en proceso de patente.
Subrayó que, si bien el sargazo funciona como refugio y alimento para la fauna marina, también absorbe metales pesados durante su crecimiento, y su creciente presencia en las costas refleja el impacto de la actividad humana sobre el ecosistema.
“Este año se ha registrado una cantidad récord de sargazo en el Caribe. Es parte de una nueva normalidad a la que debemos adaptarnos. El sargazo está ayudando a mitigar, en cierta medida, los efectos del cambio climático, al limpiar el mar. Necesitamos encontrar alternativas sustentables que puedan aplicarse a gran escala”, afirmó.
Por su parte, Beatriz Escobar Morales, investigadora y especialista en energías renovables, también del CICY, señaló que el sargazo contiene una gran variedad de compuestos bioactivos que pueden ser aprovechados. Su investigación se enfoca en la transformación del alga en biocarbón, con aplicaciones en la industria de energías renovables.
Agregó que uno de los principales retos es su recolección, ya que puede provocar dermatitis al contacto y, si no se maneja adecuadamente, afectar el ecosistema costero, incluyendo la anidación de tortugas y la salud del pasto marino.
Estos desarrollos científicos son apenas una muestra del potencial que tiene el sargazo, y el foro representa una oportunidad para construir nuevas perspectivas, fomentar redes de colaboración y generar propuestas aplicables que transformen esta problemática en un motor de desarrollo científico, económico y tecnológico para Yucatán.
Para conocer más detalles, se puede consultar la información disponible en las redes sociales de la Secihti y en el sitio web ciencia.yucatan.gob.mx.
“Sargazo en Yucatán: una amenaza creciente para el turismo en vacaciones”
El sargazo opaca el brillo del turismo yucateco
Durante las temporadas vacacionales, cuando las costas de Yucatán deberían recibir a miles de visitantes, la llegada masiva de sargazo ha comenzado a alterar el equilibrio natural, económico y social de la región. Aunque históricamente la Península ha sido menos afectada que otras zonas del Caribe mexicano, en los últimos años se ha registrado un incremento preocupante de estas algas marinas, lo que representa una amenaza directa para el turismo, una de las principales fuentes de ingresos del estado.
Reducción del atractivo turístico
El sargazo cubre las playas con mantos densos de color marrón, que no sólo opacan la belleza natural del litoral yucateco, sino que también emiten un olor desagradable producto de su descomposición. Esta situación desalienta a los visitantes, quienes buscan disfrutar de aguas cristalinas, arenas limpias y paisajes paradisíacos. En vez de ello, se encuentran con playas contaminadas, lo que disminuye drásticamente la calidad de su experiencia turística.
Obstáculo para las actividades recreativas
Las principales actividades que buscan los turistas, como el nado, el snorkel o el buceo, se ven afectadas por la presencia de sargazo en el mar. La densidad de estas algas limita la visibilidad bajo el agua y dificulta el acceso a las zonas más atractivas, lo cual incide negativamente en el disfrute del entorno natural. Los operadores turísticos también sufren cancelaciones o ajustes en sus servicios, generando pérdidas económicas.
Afectación a la imagen del destino
La acumulación constante de sargazo y la falta de atención inmediata al problema pueden generar una mala reputación para las playas yucatecas. Los visitantes comparten sus experiencias negativas en redes sociales o plataformas de viaje, lo cual tiene un impacto directo en la percepción de futuros turistas. Esta pérdida de confianza en el destino puede tardar años en revertirse.
Problemas de salud pública
Más allá del turismo, la descomposición del sargazo libera ácido sulfhídrico, un gas que tiene un olor similar al de huevos podridos y que puede causar irritación en ojos, piel y vías respiratorias. En concentraciones elevadas, este gas puede representar un riesgo serio para la salud de residentes y visitantes, sobre todo para quienes padecen enfermedades respiratorias crónicas.
Golpe a la economía local
El turismo en Yucatán moviliza una cadena de valor que va desde hoteles y restaurantes hasta guías, vendedores ambulantes y artesanos. La disminución de visitantes a causa del sargazo afecta directamente los ingresos de estos sectores, particularmente en comunidades costeras que dependen casi exclusivamente de esta actividad económica. Las temporadas vacacionales, que solían representar un repunte económico, ahora pueden convertirse en periodos de incertidumbre.
Consecuencias ambientales
El sargazo no sólo afecta la superficie del mar y la costa. Su acumulación impide la correcta oxigenación del agua, altera la temperatura y modifica los ecosistemas marinos. Arrecifes y pastos marinos pueden morir al quedar sepultados bajo grandes cantidades de algas, lo cual tiene un efecto en cadena sobre la fauna marina, especialmente sobre especies como peces, tortugas y crustáceos.
Estrategias frente a la crisis
Ante este panorama, se están aplicando varias estrategias. Por un lado, brigadas de limpieza trabajan a contrarreloj para retirar el sargazo de las playas, aunque la magnitud del problema supera muchas veces los recursos humanos y técnicos disponibles. Paralelamente, se impulsa la investigación para transformar el sargazo en biofertilizantes, materiales de construcción o biocombustibles, en un intento por convertir un problema ambiental en una oportunidad económica.
Asimismo, el sector turístico ha comenzado a promover otras zonas del estado menos afectadas, como las playas del norte (Progreso, Telchac, San Crisanto) o destinos de turismo cultural y natural en el interior, como cenotes, zonas arqueológicas y pueblos mágicos.
La colaboración como clave
Expertos coinciden en que se requiere una acción coordinada entre los tres niveles de gobierno, la iniciativa privada, organizaciones civiles y centros de investigación para enfrentar de forma integral la llegada del sargazo. Solo mediante una estrategia articulada será posible reducir el impacto de este fenómeno y garantizar que Yucatán siga siendo un destino turístico atractivo, seguro y sostenible.
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