Excelentes ventas, buen precio y una creciente aceptación de la carne de borrego.
El público yucateco cada vez valora y consume más la carne de borrego, los inventarios no logran satisfacer la creciente demanda, y por ende, el precio del producto en la actualidad es bien cotizado, por lo que al finalizar la Feria Internacional de Xmatkuil, los productores reportan muy buenos resultados.
“Esta ha sido uno de los mejores años que hemos tenido en la feria de Xmatkuil, los trece expositores lograron vender la mayoría de los animales que trajeron”, dijo el presidente de la Asociación Ganadera Local Especializada de Criadores de Ovinos de Umán, (Agleco) Franklin José Quiñones Ávila.
La feria es referente para la búsqueda de material genético en todo el sureste, por lo que se registraron ventas a ranchos de Campeche y Tabasco, mientras que muchos locales aprovecharon los apoyos que dio el Gobierno del Estado para la adquisición de sementales.
“En esta administración del maestro Joaquín Díaz Mena, se está apoyando al verdadero productor como nunca se había hecho, el año pasado se estableció un mecanismo para verificar que los sementales que se están yendo a los ranchos cumplen su función de lograr un mejoramiento genético, hoy tenemos la certeza de que así es”, subrayó.
Otro punto importante en torno a esta actividad es que Mérida se ha convertido en el hogar de mucha gente que llegó de estados del centro del país y que tienen la costumbre de comer borrego así es que en un fin de semana, tan solo en la ciudad se consumen hasta 600 animales.
Y ni se diga de Tizimín, que es el segundo polo de mayor consumo, especialmente durante la Feria en honor a los Tres Reyes, por lo que productores de todo el estado tienen una gran oportunidad para surtir el mercado.
Por esta razón la ovinocultura hoy vive un gran momento y esto quedó demostrado este sábado y domingo en el IV Festival Gastronómico del Cordero, donde mucho público local, disfrutó de la barbacoa, el asado y una amplia variedad de guisos incluyendo hasta kibis
“Los yucatecos teníamos la percepción de que la carne de borrego era muy sichosa, con un olor muy fuerte, pero eso se debía a que anteriormente se utilizaban razas menos especializadas, no había la experiencia para realizar la crianza, de los animales de la nutrición de la genética, explica Quiñones Ávila.
La gran ventaja del desarrollo genético es que el desarrollo de los animales es muy rápido, por lo que en 4 meses y medio o cinco meses de edad, ya se tienen corderos listos para el mercado, así es que los productores no pasan mucho tiempo mientras recuperan su inversión.
‘La ovinocultura es una actividad rentable, y cualquier persona que quiera invertir en el campo, tienen en la especie ovina una muy buena oportunidad para iniciar en el mercado, ya que son animales de talla no muy grande, y no requieren mucho gasto ni de una gran inversión inicial, y su manejo puede realizarlo una señora un niño una persona de la tercera edad”, detalló.
En Yucatán la raza más popular es la kathadin, que tiene muy buena tasa de crecimiento, buen desarrollo, muy buena tasa de reproducción, siguiéndole en popularidad la raza dorper que son animales muy cárnicos, por lo que son muy requeridos por el productor qué tiene todavía cuatro razas más para seguir abonando al mejoramiento genético, como lo son la pelibuey, la Blackbelly o panza negra, dorper blanco y charolais,
“Esto le permite intercambiar o rotar razas año con año,, favoreciendo el vigor híbrido y cada vez la descendencia de los animales sea mejor, por ejemplo cuando se llega a un punto de saturación en el terreno disponible se puede optar por razas terminales, es decir en las que el proceso de reproducción ya no es tan eficiente como la charolais o la dorper que se caracterizan por ser animales más pesados, muy cárnicos que se engordan y van a sacrificio”, puntualizó.
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