Presupuesto 2026: más dinero para los legisladores, menos para el INE y el Poder Judicial
Con “cuchara grande”: diputados se autorizan aumento salarial del 9.53% y justifican estímulo por ISR
Diputados se despachan con la cuchara grande
En medio del discurso de austeridad republicana y recortes presupuestales a instituciones autónomas, los diputados federales se autorizaron un aumento salarial de 9.53% para 2026, casi el triple de la inflación nacional, que según el INEGI se ubica en 3.76%.
De aprobarse en el Pleno de San Lázaro, este incremento permitirá que cada legislador reciba más de 113 mil pesos adicionales al año, además de un “apoyo compensatorio” para cubrir el ISR sobre su aguinaldo.
El Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) 2026, difundido por la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública, mantiene sin cambios la propuesta presentada el 8 de septiembre por la presidenta Claudia Sheinbaum, y será discutido este 3 de noviembre.
Sueldo legislativo sube mientras baja el de otros poderes
Los legisladores aprobaron una bolsa de 653 millones 612 mil pesos para sueldos netos en 2026, un aumento del 9.53% respecto a 2025.
Cada diputado pasará de recibir 1 millón 193 mil pesos anuales a 1 millón 307 mil, es decir, 113 mil 739 pesos más por persona.
El salario base mensual aumentará de 99 mil 457 a 108 mil 935 pesos, sin contar bonos, seguros ni prestaciones adicionales. Además, se mantiene el aguinaldo, que sube de 64 mil 587 a 67 mil 785 pesos, y se añade un “apoyo compensatorio” para neutralizar el ISR sobre ese pago, de acuerdo con documentos difundidos por Emeequis.
Mientras los diputados disfrutan de su incremento, el mismo paquete presupuestal prevé recortes de hasta 18 mil millones de pesos a diversas instituciones autónomas y al Poder Judicial.
Recortes al INE, INEGI y al Poder Judicial
El Instituto Nacional Electoral (INE) sufrirá una reducción del 18.3% en su presupuesto, lo que podría impactar su operación en un año previo al proceso electoral de 2027.
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) enfrentará un recorte del 6.8%, lo que especialistas advierten afectará la actualización de censos y encuestas nacionales.
También se proyecta la eliminación de prestaciones extraordinarias para ministros, magistrados y jueces del Poder Judicial de la Federación, bajo el argumento de “alinear percepciones al marco de austeridad”.
Sin embargo, opositores y analistas criticaron el doble discurso de la mayoría legislativa: mientras se recorta a instituciones que garantizan la transparencia y la legalidad, los propios legisladores se otorgan incrementos y estímulos fiscales.
La justificación: liberar fondos para programas sociales
Desde la bancada de Morena, el coordinador Ricardo Monreal sostuvo que los ajustes al gasto público buscan liberar recursos para destinar a universidades, cultura y seguridad, aunque en los hechos, la Cámara de Diputados aparece como una de las principales beneficiadas del reacomodo presupuestal.
Además del aumento salarial, los diputados conservarán un seguro de vida institucional valuado en casi 60 mil pesos, y su aguinaldo se incrementará alrededor de 7 mil pesos.
El dictamen también contempla mayores impuestos a productos como refrescos, cigarros, bebidas azucaradas y videojuegos violentos, mientras que la deuda pública alcanzará los 20 billones de pesos, lo que equivale a 150 mil pesos por cada mexicano.
CROC busca equidad fiscal para los trabajadores
En contraste con los privilegios legislativos, los líderes sindicales de la CROC preparan una iniciativa de ley para exentar del pago de ISR los aguinaldos de los trabajadores, como ocurría antes de 2013.
El planteamiento busca que los beneficios fiscales sean equitativos, ya que mientras los diputados se otorgan un “apoyo compensatorio” para no pagar impuestos sobre su aguinaldo, los empleados formales continúan con retenciones plenas.
Críticas y contrastes en el discurso de austeridad
Hasta el momento, no existen señales de que los diputados modifiquen su incremento salarial. Diversos sectores sociales, analistas y representantes sindicales cuestionan el contraste entre los recortes a organismos autónomos y el alza al salario de los legisladores, en un contexto económico donde el crecimiento del PIB es marginal y los precios continúan afectando el poder adquisitivo de las familias.
El Presupuesto 2026, que será votado en los próximos días, se perfila como uno de los más polémicos del sexenio por el trato desigual entre el discurso oficial de austeridad y la realidad del gasto legislativo.
En palabras de un observador parlamentario:
“Mientras los diputados se blindan con incrementos y estímulos fiscales, la austeridad parece aplicar solo para los demás poderes”.
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